Raquel Valdeolivas López. Fuenlabrada.- El período de convalidaciones y adaptaciones del curso académico 2009/2010 ha finalizado el pasado 15 de octubre, después de 14 días para realizar las peticiones por parte de los alumnos. La forma de hacerlo era exclusivamente mediante un formulario desde la página de la URJC, en su Portal Servicios, según ha informado María Velasco, trabajadora de gestión.

La diferencia con otros años se puede observar desde el inicio del curso pasado con la implantación del Plan Bolonia. Anteriormente, dentro de los mismos estudios se realizaban adaptaciones de asignaturas y créditos de manera gratuita mientras que ahora deben abonarse.


La posibilidad de adaptación de asignaturas con la implantación del Plan Bolonia entre el Grado y la Licenciatura no existe, porque son considerados diferentes planes de estudios, por lo que la única posibilidad que existe es la convalidación, en la que se ha de pagar el 25% de los créditos, según han confirmado desde el servicio de gestión.

Desde que se solicitan las convalidaciones tardan entre tres y cuatro meses en comunicarte mediante correo postal si se han concedido o no. “Se trata de un servicio con bastante tardanza ya que llegan los exámenes del primer cuatrimestre, y no sabes si te han convalidado o no asignaturas de las cuales quizá te tengas que examinar en 15 días”, comenta Unai Echazarra, estudiante de Grado de Periodismo y solicitante de convalidaciones durante el curso pasado.

Una vez concedida la convalidación también se comunica en el apartado “Mis Convalidaciones y Adaptaciones” del Portal Servicios de la universidad.

En caso de haber pagado al inicio del curso la totalidad de la matrícula, una vez concedida la convalidación, los estudiantes deben solicitar un impreso en el que piden la devolución de las asignaturas pagadas, por las que se recibirá el 75% del dinero abonado, en un plazo aproximado de 3 meses desde su aceptación.

Para mayor ayuda se adjunta en la página de la URJC la normativa para este servicio que, por lo general, suscita las quejas de la mayor parte del alumnado que lo utiliza por la tardanza en la comunicación de la aceptación o no de las convalidaciones y, después, de la prolongación para el ingreso de la devolución del dinero. “Este es un tema que deberían perfeccionar”, declara uno de los afectados.

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