Isabel Reol Martínez. Fuenlabrada.- La directora de Cátedra Género del Instituto de Derecho Público, Laura Nuño (1967), comenzó su carrera docente en la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en 1994. Pero su trayectoría vital ha estado muy unida al movimiento feminista, militante desde hace décadas, codirige el Título propio de "Género y Políticas de Igualdad entre mujeres y hombres".

Pertenece en calidad de experta en género a la Comisión de Indicadores del Observatorio contra la violencia de Género de la Dirección de Igualdad de Oportunidades del Ayuntamiento de Madrid. Secretaria de la Junta de Personal, Secretaria de Acsur-Las Segovias y miembro del Consejo Político de Universidad de Izquierda Unida Madrileña (IU-CM).

En su opinión la situación laboral de la mujer en la universidad es bastante buena en cuanto a igualdad de condiciones con el otro género, pero aún queda mucho que hacer en cuanto a la conciliación familiar.

Pregunta. De todas sus ocupaciones, ¿Qué es lo que más le gusta hacer?
Respuesta. Dar clases (máxime si es la de “Género, ciudadanía y participación política”) y escribir. Parece que contesto lo “políticamente correcto”, pero es que es así. Tampoco tengo muchas clases, lo que sin duda contribuye a que disfrute las que tengo. Cuando se tienen muchas, la cosa varía.

P. ¿En qué consiste su función? ¿Y la de CC.OO. en general?
R. La función de CC.OO, como la de cualquier otro sindicato, es la defensa de los intereses de las trabajadoras y trabajadores, intentar mejorar sus condiciones laborales (en ocasiones, simplemente que no se precaricen más de lo que están).
Mi función, depende de las temporadas. En general trabajamos en equipo, pero depende de los asuntos de la agenda y de la distribución de tareas. De pronto te puede tocar ocuparte de la negociación del segundo convenio de PDI Laboral, plantear una revisión crítica del modelo de implantación de Bolonia, participar en una movilización internacional por el “empleo digno” o el tema del Estatuto Docente.

P. ¿Diría que la URJC es tolerante con las mujeres, o aún queda algo por hacer?
R. Por desgracia, no hay un solo ámbito donde no quede algo que hacer. Pero las Administraciones Públicas y, en concreto, las universidades son “burbujas” en las que la distancia de género en las relaciones laborales es más reducida. No obstante, respecto a la conciliación de la vida profesional y familiar o a la racionalización de horarios queda mucho por hacer. Seguimos instalados en una filosofía en la que se valora la presencia en el puesto de trabajo más que el cumplimiento de objetivos.
Luego está el tema de la formación en género en las universidades, se sigue considerando como de “segunda regional”, son estudios que se encuentran en una posición o en una consideración susceptible de “rebaja”.

P. ¿La mayor parte de las quejas, por qué problemas se dan?, ¿Cómo está la situación laboral en la Universidad?
R. La situación laboral es muy heterogénea tanto en la estabilidad como en el régimen laboral. Con respecto a las quejas, los problemas que mayor interés acaparan son los complementos, la estabilización o la promoción y ahora con el asunto de la integración en Bolonia está habiendo mucha queja.


P. ¿El cambio al Plan Bolonia ha supuesto un descontento para el profesorado?
R. Por lo que a mí me llega, sí. Hay bastante descontento. Irá por personas. Pero en general no creo que estén “realmente contentos o contentas”.

P. ¿Qué opina usted acerca del Plan Bolonia?
R. El Plan Bolonia está ya en marcha, hay poco que discutir. El problema ahora es el “cómo” se está haciendo la puesta en marcha. No se está contando con los trabajadores y las trabajadoras, personas con una trayectoria profesional en la gestión y en la docencia que tienen mucho que decir porque sus condiciones laborales se verán afectadas. A mi juicio, no tener en cuenta a los actores implicados es un error que puede poner en juego el éxito del proceso y la calidad de la formación. ¿Se ha consultado algo con el alumnado? Pues tampoco. ¿No tienen absolutamente nada que decir?

P. ¿Hay algún evento próximo organizado por CC.OO?
R. En unos días, el 17 de noviembre, empieza una campaña con propuestas sindicales para salir de la crisis económica sin que ello suponga una pérdida de derechos para las trabajadoras y trabajadores. Esta campaña, culminará con una manifestación el día 12 de diciembre a las 12 horas.
Desde la Federación Regional de Enseñanza acabamos de hacer público un documento “Para salir de la crisis, más y mejor educación, más y mejor enseñanza pública”. Lo que no puede ocurrir es que una crisis ponga en juego la financiación de las universidades públicas, como ocurrió el año pasado. En este país hemos conseguido democratizar la enseñanza superior, si se dispone de tiempo para estudiar cualquiera puede acceder a la universidad. Yo creo que eso no debería ser negociable, no puede serlo.

P. ¿La crisis les ha afectado de alguna manera?
R. Empezamos el curso académico 2008-2009 con un recorte presupuestario decidido unilateralmente y sin previo aviso por la Comunidad de Madrid. La crisis está afectando, claro que está afectando. Como sindicato hay una gran preocupación por las tasas de desempleo y porque este proceso contribuya a precarizar aun más las relaciones laborales.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena entrevista y el 12 de Diciembre, habrá que ir a la manifestación, teniendo claro para lo que se hace

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