El funky también tiene su lugar dentro de la URJC

Valle Martín del Campo López. Fuenlabrada.- Entre las múltiples actividades deportivas que se imparten en el gimnasio de la Universidad Rey Juan Carlos se pueden encontrar clases de funky, un baile moderno que llama la atención entre los jóvenes debido a que es una novedad en los bailes que se han impartido anteriormente y al programa “Fama” de televisión.

Blanca Solana es la profesora que imparte estas clases, una joven de 21 años que pone mucho interés en que sus alumnos aprendan el baile y que sobretodo se diviertan practicándolo. Este año hay menos alumnos que el año pasado debido a que en el curso anterior se realizó una campaña publicitaria promocionando las clases, algo que no se ha hecho para este curso, pero aún así ha tenido una buena acogida entre los alumnos.

Las clases se imparten los lunes y los martes, un turno por la mañana y otro por la tarde. En total son cuatro horas a la semana y apuntarse a estas clases cuesta 25€.

Estas clases se imparten en una sala grande situada dentro del gimnasio. Dicha sala cuenta con un gran espejo en la pared donde todos los participantes pueden verse bailar y cerciorarse de que lo hacen bien, siguiendo a la profesora que se pone delante de ellos para que los demás le sigan. Esta sala también cuenta con un equipo de sonido, ya que sin música esta clase no se podría realizar puesto que es un componente primordial.

El desarrollo de una clase suele ser siempre el mismo. Al comenzar, se realizan calentamientos de diversos tipos y después algún ejercicio para fortalecer los músculos. Después se realiza una pequeña actividad para que los alumnos se habitúen a la clase y acto seguido se comienza con la coreografía que ese día haya que aprender. Para finalizar, se llevan a cabo una serie de estiramientos para proteger los músculos.

El funky era un baile casi desconocido para la mayoría de la gente de este país, pero a raíz del programa “Fama” y de las nuevas tendencias que llegan desde otros países se ha despertado el interés entre los jóvenes por conocer más acerca de esta danza.

Por realizar las clases de funky los alumnos reciben dos créditos de libre elección, lo que hace que se motive más a la gente que se quiere apuntar, aunque la mayoría de los alumnos, por no decir todos, asisten porque les gusta bailar y pasárselo bien con el funky.